Abrasión

La abrasión de las superficies de estanqueidad de los O-Ring es una de las causa más frecuentes de avería en las aplicaciones de estanqueidad dinámica. El frotamiento repetido entre al anillo y las superficies del alojamiento conduce al calentamiento de la superficie del O-Ring, al consiguiente aumento del roce y a la modificación de las características de la mezcla. Estos factores provocan el desgaste y la formación de laceraciones sobre la superficie del anillo (figura 9.3). La presencia de un fino velo de lubricante puede decelerar la degradación del O-Ring. Los daños provocados por la abrasión están presentes solamente sobre un lado facilitando la localización de la causa del daño.
O-Ring con superficie abrasionada Figura 9.3
O-Ring con superficie abrasionada y con la consiguiente rotura
Aún siendo un fenómeno ligado principalmente al movimiento correspondiente entre los elemento, se pueden tener pérdidas de la eficiencia de la estanqueidad debidas a la abrasión también en aplicaciones estáticas, si la presión de trabajo es pulsante y con fuertes variaciones del valor de pico. En este caso la abrasión es provocada por pequeños desplazamientos a los cuales el O-ring está sometido. Un buen acabado superficial, unido a la lubricación del anillo y a la utilización de fluidos sin impurezas sólidas, puede disminuir de manera considerable la incidencia de las averías por abrasión de los O-Ring.
Abrasión de juntas tóricas